R. y G.
Hace un año en Reno, Nevada “Extraño a Dora y a los nenes. Esto es un circo, viejo. Alrededor del ring hay mesas con faisanes, champagne, putas hermosas vestidas de gala, millonarios con guardaespaldas, camareras prácticamente en bolas sirviendo. Risotadas. Todo el mundo fuma habanos o cigarrillos o marihuana. Es una cagada, un desastre. ¿Quién puede pelear así? Ah, te tiran comida al ring si algo de lo que estás haciendo no les gusta. Pan y circo, viejo. Yo aquí no peleo más.” Esas palabras fueron dichas al amigo que oía del otro lado del teléfono. Estaba harto, pero no podía volver, y eso lo enfurecía todavía más. Sally, la esposa de Joe, le caía bien. Había dado la cara por él en un intento por calmar la furia de su marido, consiguiéndolo. Pero era consciente que eso era pan para hoy y hambre para mañana. Una noche, el champagne que servían en el cabaret, le aflojó la lengua. Y joe le advirtió que no regresara por ahí. Pero a la mañana siguiente, cuando llegó al tráiler donde v